El nazismo se vinculó al esoterismo. En su locura buscó objetos sagrados, lugares misteriosos para dominar al mundo. Lo hizo en lugares remotos y también cerca de su casa. ‘La entrada a la Tierra’. Fue así como la llamó el dictador alemán obsesionado por Untersberg. Los nazis conocían la rumorología y leyenda alrededor de esta montaña: desapariciones, personas que volvían al cabo de los años con la misma ropa y sin recordar nada de lo que les había ocurrido, cavernas profundas que no se conocía hasta donde llegaban…

Untersberg es el macizo más septentrional de los Alpes de Berchtesgaden, un espolón prominente a caballo entre la frontera entre Berchtesgaden, Alemania y Salzburgo, Austria. Y desde hace siglos siempre ha estado ligado a leyendas que descansan sobre desapariciones y cavernas misteriosas. Como en todas las montañas, el temor a seres mitológicos y a cosas extrañas que ocurrían alimentaban el miedo.

Es cierto que con el paso del tiempo todo se atenúa y también que tres excursionistas desaparecieron en la década de los 80 en este bucólico rincón de los Alpes y después de darlos por desaparecidos la historia giró de forma brusca y llamaron a sus casas desde un punto muy lejano y sin saber cómo habían aparecido allí.

Untersberg es un lugar bellísimo, un lugar de recreo, del que desde hace muchos años no descubre historias, pero que están allí, registradas desde hace siglos. Si algún día vas por Salzburgo y quieres allí, la montaña te espera.

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